Superficial intento de realizar una crítica a la política exterior estadounidense. Asistimos, nuevamente, a un género de moda -Crash, Babel-: historias que se cruzan. Desde un poderoso senador a un poco creíble profesor universitario, pasando por el típico estudiante con talento, dos idealistas soldados y una periodista, interpretada por Meryl Streep en uno de sus peores papeles.
La película no decepciona por lo que se observa sino porque es una obra incompleta. Parece como si lo que se pretende exponer es un extenso prólogo al que le falta un desarrollo y una conclusión.